En la actualidad somos muchos los que nos atrae la idea de tener un acuario y sumergirnos en el mundo de la cría de peces y otros organismos acuáticos. Según estudios recientes cuidar de peces, es decir tener un acuario en casa y cuidarlo uno mismo tiene efectos terapéuticos, reduciendo el estrés al producir un estado de relajación. Esto lo podemos comprobar, ya que al despertar por las mañanas y sentarse frente a la pecera con taza de café en mano solo a mirar los peces dando vueltas y haciendo sus cosas, curiosamente hace que tu mente se desconecte de los problemas diarios.En esta publicación nos comenzaremos a introducir en el mundo de los acuarios de agua salada.
Los acuarios de agua salada requieren de mayor esfuerzo y tiempo que los acuarios de agua dulce. En los acuarios de agua salada debemos conseguir replicar al máximo las condiciones ambientales del hábitat de los peces que vamos a meter en dicho acuario, esto como ya he dicho se debe a que debemos dar las mejores condiciones de vida a los peces.
No debemos engañarnos, un acuario de agua salada tiene un costo mayor y más trabajo de mantenimiento que los acuarios de agua dulce.
En cuanto a la iluminación de los acuarios de agua salada se conserva la regla basica que hay para los acuarios de agua dulce de no exponer el acuario a la luz de sol directa y retirados de cualquier fuente de calor. En los acuarios de agua salada deberá acercarse lo más posible al watio por litro, lo cual se traduce en un gasto eléctrico considerable.
Este tipo de acuarios requieren numerosos test para controlar los parámetros como las temperatura, Ph, densidad, entre otros, requerirás un enfriador o calentador en algunos casos y también un skimmer. El skimmer es un equipo que ayuda en el filtrado del acuario salado,, expulsando del mismo sustancias potencialmente toxicas para los peces.
El acuario de agua salada.
El acuario de agua salada o marino, debe tener un tamaño considerablemente grande, tanto como sea posible, esto con el fin de obtener la mayor estabilidad en la calidad del agua. las dimensiones mínimas para un acuario de agua salada son largo 90cm, ancho 30cm, alto 90cm. es conveniente que sea profundo ya que los peces de agua salada suelen nadar en la superficie y en el fondo, tanto vertical como horizontalmente.
Casi todos los peces que se tienen en un acuario marino tropical son de arrecife de coral. En los arrecifes coralinos, el nivel de oxígeno del agua es estable y las temperaturas también suelen ser constantes. Los niveles de luz son altos. Este ambiente natural tan estable es la causa de que los peces marinos resulten difíciles de mantener. Estos peces no pueden enfrentarse a variaciones ambientales significativas. situación que los peces de agua dulce pueden enfrentar fácilmente.
Los acuarios marinos tropicales deben tener más escondites que peces, y para las especies excavadoras, disponer de un substrato fino. La arena que se utiliza generalmente es de coral con una composición de carbonato de calcio, formada por esqueletos de animales coralíferos. En el acuario marino de agua fría hay que controlar la temperatura, el pH, la densidad del agua y la salinidad, y hay que usar un refrigerador de agua.
En el caso de los acuarios de agua salada la ubicación del mismo debe ser elegida con mucho más cuidado que en el caso de los acuarios de agua dulce, esto se debe a que ademas de tener las consideraciones mencionadas lineas arriba, también debemos tener en cuanta que el agua salada puede estropear los muebles, alfombras o cortinas por ejemplo, con las que pueda entrar en contacto accidentalmente, esto se soluciona instalando el acuario en un lugar alejado también de este tipo de muebles y decoración. Sumamente importante que el acuario tenga una tapa, así evitamos evaporación del agua con su respectivo incremento de la salinidad y que los peces se salgan saltando del mismo.
Durante años, el cuidado de peces marinos fue obstaculizado por la necesidad de utilizar agua de mar natural (que había que purificar y almacenar para su uso) porque la mezcla de sales artificiales era insatisfactoria. Actualmente, la “sal de mar” está disponible para ser mezclada con agua del grifo para producir una excelente agua sintética en la cual los peces marinos pueden prosperar. Otra característica importante del agua de mar es su pH alcalino, normalmente alrededor de 8,0-8,3.
La producción por parte de los peces de dióxido de carbono, se disuelve en el agua y tiende a hacer un pH ácido. En las condiciones de un acuario salado, si no se tiene cuidado, tanto el pH como los niveles de nitrógeno pueden fluctuar excesivamente, dado que la acción amortiguadora del océano está ausente.
Los fluorescentes deben proporcionar luz brillante y rica en ultravioletas que los peces necesitan para su salud, y que resalta sus colores. El exceso de luz no es peligroso, al contrario, facilitará el crecimiento de las algas; los peces marinos se alimentan de las algas, y éstas, por otro lado, ayudan a neutralizar los residuos tóxicos de los peces.
Se recomienda usar un filtro biológico. Es importante que el aspirador sea lo más potente posible, para crear una corriente de agua salada adecuada. Las bacterias que crecen en el filtro transforman o hacen menos tóxicos los productos en descomposición de la excreción de los peces, igual que en los acuarios de agua dulce. También se pude instalar un filtro que contenga carbón activo. El carbón activo destruye químicamente los residuos orgánicos que no son extraídos por los filtros biológicos. En este filtro, a la larga también se instalan las bacterias, y lo hacen doblemente efectivo. Para conseguir una mejor purificación del agua, además del filtro convencional se pueden utilizar espumadores de proteínas (protein skimmer), lámparas de luz ultravioleta y ozono.
Para tener éxito en el cuidado de peces marinos es necesario una revisión periódica de las condiciones del agua para evitar cualquier problema. sin embargo una vez el acuario ya ha sido instalado este es un trabajo que requiere pocos minutos a la semana.
Las especies de agua salada son más costosas, sin embargo son también más llamativas a la vista y llenan de más vida el acuario gracias a sus vibrantes colores y peculiares formas.
